El Gallinero: El poblado de los 300 niños

No hay agua corriente, ni baños. Hay mas ratas que perros y nadie tiene trabajo. En el asentamiento chavolista de El Gallinero, en Madrid. Viven 300 niños con sus familias. Un informe de Save the Children y la universidad de ComillasS Sin alerta de una situacion imaginable en un país del Primer Mundo. Sin embargo hay esperanza. Gracias a los voluntarios  de la Parròquia San Carlos Borromeo de Entrevias que llevan  10 años trabajando allí, los pequeños estan escolarizados y sus padres no trafican con drogas. Solo necesitan una oportunidad.....  Y no ser arrastrados por el fango. (Por Nacho Carretero).

Una carrera contra el tiempo: los datos del informe the Save the Children  son propios de un país del Tercer Mundo. El indice de pobreza del poblado alcanza el 93% de la poblacion. La probabilidad de que estos menores que corren no :-)alcancen los 60 años de vida es del 98%

Hay que barrer sobre el barro un acto de dignidad admirable. Lo lleva acabo Maria, con una vieja escoba desilachada.
Aparta los restos de basura que se mezclan con la tierra delante de su chabola y después los tira.
Cuando termina, descansa con su mano en la cadera lleva un pañuelo en la cabeza. No hay un solo desperdicio frente a su casa.
Hoy cae aguanieve sobre El Gallinero . El dia apenas regala  un grado sobre cero y la tierra se ha hecho barro en el poblado mas castigado de Madrid. Probablemente de toda España. 
Enclaustradas entre la autopista A~3 y la M~50 viven 94 familias en infraviviendas. Casi 500 personas, la mitad 250 son niños.
La chabola son de madera y lata. Ahora una tabla lisa, ahora un trozo de carton; ahora una placa de aluminio.
Parecen fragiles, improvisadas, pero estan hechas con habilidad. Bien hechas:"Cogemos material de la basura,... madera o palos del campo y con ellos construimos las chabolas", explica Leonard uno de los vecinos del poblado. Pura supervivència.I
"Tenemos dos hijos y el mejor dia sacamos 15€"
Samuel y Maria de 19 y 17 años: "tenemos dos hijos y vivimos en una chabola del hermano de Samuel.
Ahi estamos bien. Pero tenemos la ropa metida en una mochila para poder sacarla rapida si vienen a derrumbarla.
No tenemos trabajo, lo que hacemos es  ir a pedir. A veces sacamos 15€ y eso es un buen dia.
Para comer necesitamos ayuda de la Cruz Roja y de los voluntarios".

Ocupan 20.000 metros cuadrados. Las chabolas tienen luz gracias a unos improvisados postes que desembocan en una toma donde acumulan conexiones y cables. Si se estropea eso adios a la electricidad en el poblado. No tienen agua.
 Solo hay una fuente a 500 metros donde las mujeres llenan los bidones a primera hora de la mañana. No tienen baños.
A un lado del poblado sirve para los hombres y al otro para las mujeres Los niños improvisan. Cuidado donde se pisa.
"Yo y mis hijos pedimos; sueño con que mis nietos tengan un trabajo"
Petra de 52 años con su nieto:" tengo díez hijos, seis estan aquí y cuatro estan en Rumania. Me gano la vida vendiendo la Farola. Mis hijos tambien piden. Solo sueño que mis nietos tengan un trabajo. Sueño con eso".

En medio de la basura. Kilos de basura. Se acumula en los badenes naturales, grandes zanjas, convertidas en vertederos que discurren entre las chabolas . Y con ellas los perros, gatas y ratas ("ratones"como le llama los niños). Que campan a sus anchas entre las .
" Me dedico a lo que puedo; la verdad. Necesito comer"
Sava Martin de 51 años: "Primero vivi en un Campamento de la Cruz Roja, pero nos echaron. Nos fuimos a la Cañada y nos echaron. Luego construimos estas chabolas .Tengo seis hijos.¿A que me dedico? A lo que puedo, de verdad ...Necessito comer.
Las mordeduras a niños son habituales. Por cierto estamos en Madrid a veinte minutos de la Puerta del Sol.
"Si yo fuera político y esto siguiera en pie" .
Habla Jorge, voluntario de la Parròquia de San Borroneo de Entrevias. Acude casi a diario a ayudar a los habitantes. "Llevan aquí desde el 2000 cuando los echaron de la Cañada Real" explica " en ese lugar se vulnera los derechos humanos. Así de claro. Y nadie hace nada" 
Casi todos los habitantes  de El Gallinero viven de la mendicindad. De 94 familias, solo 15 perciben  la renta básica.
Cruz Roja, Caritas y la Parroquia de Entrevías hace el resto. Piden, limpian parabrisas o venden periódico benefico La Farola. Un dia soberbio es volver con 20 € a casa. "Pero el autobus nos cuesta ocho", se queja Olivia, madre de tres hijos. "A veces no nos llega para regresar".
"Espero mi cuarto hijo. Me quedan tres pañales"
Ana de 24 años:" Estoy esperando mi cuarto hijo. Mi marido gana unos 100 o 150€ al mes, y yo no puedo salir a pedir porque estoy embarazada. Ahora mismo me quedan tres pañales y se me ha acabado la leche. Siempre es asi".
No estan libres de pecado, claro. Sobre una pendiente pegada al poblado descansan metros de cable. Algunos vecinos se dedican al hurto de cobre. Despues lo queman y lo revenden. "Cuando vemos salir humo del poblado-explica el policia- nos acercamos porque sabemos que estan quemando cable". Tambien hay lo que la policia llama ¨descuideros¨. Algun grupo sobretodo de mujeres, que se desplaza al centro de Madrid y allí se agencia carteras de turistas  despistados. " Son hurtos sin violencia, no son conflictivos", comenta el agente. La policia afirma , además que en El Gallinero no hay trafico de drogas, algo que no puede decir  el vecino sector  6 de la Cañada Real, el asentamiento chabolista mas grande de Europa.
"Nos tiraron la Chabola, pero logre salvar mi bicicleta"
Diego de 11 años: " Un dia vinieron  y nos tiraron la chabola. Nos quedamos sin casa, pero logré sacar la bicicleta. Ahora esta en mi casa nueva. Voy al colegio. ¿Siempre? Bueno a veces  hace mucho frio fuera y me quedo un rato mas en cama".
 "Nos llevamos bien con ellos", dice un vecino" A veces traen electrodomesticos para que los desaguacemos y nos dan 15 €". Jorge el volutario, confiesa despues: "No se llevan bien . En realidad les tiene miedo. Hay bandas en la Cañada muy peligrosas.

La primera generación que va al cole
El 70% de los niños de El Gallinero estan escolarizados. Es el brillante resultado de una larga pelea de voluntarios como Blanca. Consiguieron dotar de papeles a todos, pelearon su escolarización y lograron que les pusieran autobuses. Ahora van a varios colegios de la zona. "Hay uno que es concertado y tienen que ir uniformados", explica Blanca. "Un día un profesor echó a un niño de clase porque traía los zapatos llenos de barro. Creía que era una travesura. Pero por aqui es imposible caminar sin embarrarse".
El desafío es lograr ahora que te permitan escolarizar a menores de tres años. "Todavía no les dejan. La Administración dice que no tiene sentido", afirma Blanca.
"Pero si los bebés se quedan aqui son las hermanas quienes tienen que cuidarlos. Y dejan el colegio por eso".

Por las tardes los volutarios ayudan a los niños a hacer los deberes . En un habitaculo de hierro que alberga unos pupitres, un puñado de valientes, de manera altruista, los ayudan a estudiar con infinita paciencia. Es la primera generación que va al colegio en el poblado. "Tiene mucho merito que esos niños vengan a hacer los deberes. Padecen diarreas, deshidrataciones y hasta sarna. Y aun asi quieren estudiar". La estampa lo corrabora. Con la nevada contenida por un viento helado pasa un pequeño de tres años descalzo sobre la tierra. Lleva un pequeño jersey, pero en sus diminutas piernas no hay ni pantalones ni calzoncillos.
Los habitantes del Gallinero no se llevan bien con la autoridad. "Nos pegan", se queja Leonard. "Un dia un policia pego cuatro disparos al aire delante de mi chabola mientras me insultaba". Jorge explicaba: "Hay abusos si. Pero tambien hay policias que los tratan bien. Como en todas partes".

Mucho temor y odio que tienen los vecinos les tiene a los agentes viene de los derribos. El Ayuntamiento, cada pocas semanas, tira algunas chabolas, por ser viviendas ilegales.
Les ofrecen alternativas en campamentos para extranjeros o en el mejor de los casos, viviendas subencionadas, pero los habitantes de El Gallinero replican: "Me dan una casa donde no puedo pagar nada: ni luz, ni agua, ni alquiler, aunque sea minimo. Yo tengo 150€/mes. ¿A que casa voy a ir? Si me derriban la chabola, me dejan sin nada"
A El Gallinero sigue llegando gente. Se levanta nuevas chabolas por las que se derriban. O se meten mas familias en la misma. El caso es que ahi sigue el poblado, si acaso el rincon mas pobre de Madrid. Miseria extrema a doce Kilometros del centro. Un pequeño paseo en coche que demuestra que hay mas mundos en este.
https://vimeo.com/43422209
https://www.youtube.com/watch?v=O7ljNGWjMzE
Fuente:
Xl Semanal