Ni el aborto ni la homosexualidad serán dos temas de discusión para el papa Francisco, quien cree que la Iglesia Católica Romana ha crecido obsesionada con la discusión de esos temas, el matrimonio entre personas del mismo sexo y los anticonceptivos. "El anuncio del amor de Dios está antes que las enseñanzas morales y religiosos" , expresa Francisco. El periódico The New York Times reseñó una entrevista de 27 páginas concedida al padre Antonio Spadaro y publicada hoy en la revista de los jesuitas "La Civiltá Cattolica", en la que el papa dice que la Iglesia que lidera debe ser una "casa de todos" y no una "pequeña capilla". El pontífice también habla sobre los divorciados y señala que "hay que tener siempre en cuenta a la persona". "Dios acompaña a las personas y es nuestro deber acompañarlas a partir de su condición", por lo que hay acompañarlos "con misericordia", palabras que también las aplicó a los homosexuales. "Una vez una persona, para provocarme, me preguntó si yo aprobaba la homosexualidad. Yo entonces le respondí con otra pregunta ‘Dime: ¿Cuando Dios mira a una persona homosexual aprueba su existencia con afecto o la rechaza y la condena?’" , cuenta como anécdota. El periódico neoyorquino expuso que las palabras del papa pueden traer consecuencias en una Iglesia cuyos líderes tienden a poner en la primera posición de la agenda de política pública el aborto, matrimonio gay y la anticoncepción. "No es necesario hablar de estos temas todo el tiempo", expresa el papa. No es la primera vez que el papa Francisco hace expresiones que podrían crear incomodidad entre los mismos miembros de la Iglesia Católica. Él incluso ha reconocido que “jamás ha sido una persona de derechas”. En un tono cercano y sencillo, el papa se ha definido en todas sus intervenciones mediáticas como un pecador: "Soy un pecador en quien Dios ha puesto los ojos". Líderes católicos alrededor del mundo ven con buenos ojos la línea de pensamiento del papa, pues según ellos, va a la par con las tendencias mundiales y aviva la fe en los católicos que se han apartado de la Iglesia que por años parecía haber estado estática. Francisco invitó a encontrar un nuevo equilibrio para que la Iglesia no "caiga como un castillo de naipes" y "no pierda la frescura y la fragancia del Evangelio". http://www.elnuevodia.com/papafranciscoiglesiacatolicaobsesionadaconelabortoylosgays-1599793.html
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